lunes, 21 de septiembre de 2015

Escribir y otra forma de mostrar tus sentimientos

Hay momentos en la vida que por mucho que quieras, no terminas de mostrar tus sentimientos. No terminas de sacar todo lo que llevas dentro. Hablas con personas, con amigos, familiares, pero falta algo. Un folio. Un folio y un teclado donde poder soltar todo. Tus inquietudes, lo que tu cabeza no dejar de dar vueltas, lo que sueña tu inconsciente... Y es que en mi vida, es necesaria esa escritura.

Hoy mismo necesito gritar a través de un papel que nada es eterno. Que todo llega. Que lo más importante en esta vida son los pequeños detalles que no sabemos valorar diariamente. Que a veces lloramos de más y otras veces reímos de menos. Que a veces lo más importante es girar la cabeza a un lado y al otro y mirar más allá.

Cuando miras alrededor y ves diferentes situaciones irreversibles te das cuenta que tu no trabajo es temporal, ya que tarde o temprano llegará algo. Que a pesar de esas situaciones fuera de lo normal, la gente sonríe, disfruta de la vida y vive sin lamentarse.

Que quiero seguir teniendo momentos ilusionantes y retos que te llenen en cada paso del camino hasta que logras el objetivo. Pero sobre todo quiero seguir teniendo momentos pequeños que te dibujan una sonrisa verdadera día a día.

Que necesito y quiero seguir escribiendo. Vaciarme por dentro para volverme a llenar. Porque como diría el gran Andrés Montes, porque la vida puede ser maravillosa. Gracias por tanto, vida.